Entiende Tu Piel Y Transforma Tu Rutina

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Antes de invertir en cualquier producto, lo más importante es esto: conocer tu tipo de piel. No importa si eres fan del skincare o apenas estás armando tu rutina, entender cómo se comporta tu piel es el primer paso para elegir fórmulas que realmente funcionen. ¿Lista para descubrirlo?

Si Brillas Mucho: Piel Grasa

Tu piel tiende a producir más sebo, sobre todo en la zona T (frente, nariz y barbilla). Es común ver poros más visibles, brotes o puntos negros. Lo ideal es mantenerla limpia y equilibrada con productos que regulen la grasa sin resecar ni eliminar la hidratación natural. Piensa en geles ligeros, tónicos con ingredientes purificantes y texturas oil-free.

Si Se Siente Tensa: Piel Seca

Aquí el reto es la hidratación. La piel seca puede lucir apagada, con textura o incluso presentar zonas escamosas. Si al lavarte la cara sientes que te “jala” o arde, necesitas fórmulas nutritivas: limpiadores cremosos, humectantes ricos y sueros que refuercen la barrera de hidratación.

Si Es Una Mezcla : Piel Mixta

La zona T suele ser más grasa, mientras que mejillas y contorno están normales o secos. ¿Solución? Fórmulas que hidraten sin saturar, como geles en crema, sueros ligeros y limpiadores suaves que mantengan el equilibrio.

Si Reacciona Fácil: Piel Sensible

¿Tu piel se enrojece, pica o arde con algunos productos o cambios de clima? Entonces probablemente sea sensible. Busca opciones con pocos ingredientes, sin fragancia, y con activos calmantes como avena, centella asiática o alantoína.

Mini test exprés: Lava tu rostro con un limpiador suave, no apliques nada y espera una hora frente al espejo:

• Brillosa: piel grasa

• Tirante o con parches secos: piel seca

• Brillosa solo en zona T: piel mixta

• Enrojecida o irritada: piel sensible

Conocer tu piel es el primer paso para cuidarla mejor. Haz que cada paso de tu rutina cuente.