#DesdeElTocadorBJMX: Mía Rubín, Cantante Y Actriz

Vía: @Miarubinlega

Mía Rubín es cantante, actriz y una de las artistas jóvenes más prometedoras de su generación. Aunque creció rodeada de luces y escenarios —como hija de Andrea Legarreta y Erik Rubín—, ha trazado su propio camino en la industria con una mezcla de talento, carisma y una profunda dedicación a su arte. Su voz potente y emotiva la ha llevado a presentarse en escenarios de gran formato, como el Cumbia Machine Tour, donde demostró que su presencia escénica está a la altura de los grandes.

Recientemente lanzó su primer sencillo como solista, una propuesta fresca que marca el inicio de una nueva etapa en su carrera, más íntima, más auténtica y completamente propia. En paralelo, ha explorado el mundo de la actuación, consolidándose como una artista versátil que transita con naturalidad entre la música, el teatro y la televisión. Pero más allá del escenario, Mía representa una nueva generación que apuesta por la autenticidad y el equilibrio entre lo profesional y lo personal.

¿Desde qué momento nace tu amor por la belleza?

Creo que mi amor por la belleza siempre ha estado presente, no recuerdo un momento específico en el que haya comenzado, simplemente siempre ha sido parte de mí. Y no me refiero solamente al maquillaje o al skincare, sino al hecho de sentirme femenina, coqueta, de disfrutar verme y sentirme linda. Desde niña sentí esa necesidad de conectar con mi lado más femenino; hay fotos mías usando vestidos de princesas y posando como si no me diera cuenta de que me estaban viendo, pero claramente quería que me vieran. Desde entonces me encanta arreglarme para mí, y hasta hoy lo sigo disfrutando muchísimo. Siento que es un ritual muy bonito de autocuidado, de amor propio, y me encanta tener ese momento para mí.

¿Cómo defines la belleza?

Para mí, la belleza es amor propio, 100%. Creo que cuando realmente te amas, es cuando más bella te sientes. Las veces que más bonita me he sentido han sido cuando estoy en paz conmigo misma, cuando me siento segura y me trato con amor. La belleza verdadera nace desde adentro, es esa autenticidad y esa luz interior que simplemente se refleja en el exterior. La gente lo nota cuando te amas, y también cuando no. Por eso creo que es tan importante cultivar ese amor propio, más allá de lo físico.

¿Cuál es el aprendizaje más grande que has tenido en esta industria?

El mayor aprendizaje ha sido ser fiel a mí misma y no dudar de quién soy. Esta industria muchas veces vende una idea de perfección y estándares muy específicos de belleza, que pueden llegar a ser dañinos. Pero he aprendido que, incluso dentro de ese contexto, hay espacio para la autenticidad. Somos artistas, pero también somos humanos, y no siempre vamos a ser perfectos ni física ni emocionalmente. Valoro mucho haber encontrado belleza en mi individualidad y en aceptar mis imperfecciones. Eso me ha dado mucha paz y fuerza.

Cuéntanos sobre tu rutina de día y noche.

Mi rutina es súper sencilla y consta de pocos pasos. En la mañana, me lavo la cara con un cleanser suave y aplico un suero ligero que ayuda con el enrojecimiento e imperfecciones. Como normalmente voy al gym, prefiero no saturar mi piel con productos y sólo uso eso antes de entrenar. Al terminar, me vuelvo a lavar la cara, aplico una crema hidratante y uso Aquaphor en los labios. Por la noche, repito el limpiador facial y aplico una cremita específica para prevenir imperfecciones. Si me maquillo, me encanta usar las glowy drops de Drunk Elephant que dejan un brillo súper bonito, y las mezclo con el glazing milk de Rhode, que es muy hidratante y le da a la piel ese efecto de “dona glaseada”. Uso una cremita de ojos de Shiseido y, si voy a maquillarme más, sólo uso corrector, blush, labial, rímel, highlighter (en polvo o crema) y setting spray. Al final del día, siempre me desmaquillo bien. Como uso rímel a prueba de agua, aplico un aceite específico para los ojos y toallitas desmaquillantes de Clinique para no lastimar mi piel.

Un paso en tu rutina que JAMÁS puede faltar

Quitarme el maquillaje. Ya estoy en ese punto donde no puedo dormir sin lavarme la cara y aplicar mi cremita. Siempre uso la mascarilla de labios de Laneige, en sabor vainilla (además sabe rico si accidentalmente llega a la boca). Y nunca puede faltar el Aquaphor en mis labios —me encanta mantenerlos suaves e hidratados.

¿Cuál es el consejo de belleza más importante que te dieron y cuál darías tú?

El mejor consejo que me han dado es mantener mi piel hidratada. Hubo un tiempo en el que, por miedo a los granitos, evitaba usar crema y mi piel terminó viéndose fatal: seca, escamosa, hasta se me caía. Ahora sé que la hidratación es clave y lo aplico todos los días. Ese mismo consejo es el que yo daría: hidrátate bien. Y también diría que no necesitas mil productos para cuidar tu piel. Con dos o tres bien elegidos es más que suficiente para tener una rutina efectiva.

¿Qué tratamientos recomiendas como complemento a los productos?

Creo que una limpieza facial de vez en cuando puede hacer maravillas. A mí me encanta hacerme una con técnicas coreanas; hay un lugar precioso donde te consienten muchísimo —te ponen mascarillas en las manos, el ambiente es tan relajante que hasta puedes quedarte dormida. Aunque no lo hago tan seguido como me gustaría, siempre que tengo oportunidad lo disfruto muchísimo. Es un gran complemento para cualquier rutina de skincare.

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